Publicado: viernes 20 de marzo por VARIAS AUTORAS
Hace 3 meses, TEA con A daba la bienvenida al invierno publicando un artículo donde diferentes mujeres vinculadas a Autismo Huesca, nos contaban porque para ellas era especial la Navidad y nos deseaban una felices fiestas inclusivas: TEA con A 19.12.2019. Hoy ya es primavera, entramos en una nueva estación y hemos vuelto a pedir a diferentes mujeres que forman parte de la Asociación Autismo Huesca, en su condición de socias o madres de mujeres con TEA socias de nuestra entidad, que nos den testimonio de cómo ellas, sus hijas y sus familias, han sabido manejar el cambio brutal que ha significado esta semana de confinamiento en casa. Y este artículo que es muestra de sacrificio pero a la vez de amor y esperanza, entendemos que debemos compartirlo y difundirlo como una herramienta más que acerca al objetivo de seguir siendo responsables, quedándonos en casa, pero seguir siendo también nosotras mismas. Coincidiendo en que ningún virus nos va a quitar la primavera. Gracias familias, gracias a todas.
MARA - INÉS
Estos días sin duda son distintos para todos pero estamos intentando mantener una misma rutina de horarios y de actividades.
De momento Inés no acusa la falta de salir al exterior, si bien si está algo más rara.
Gracias al apoyo de nuestra asociación de Autismo hemos estado en todo momento informados de cómo poder salir en caso necesario pero estamos intentando aguantar...
Para ello hemos hecho parte de sus actividades diarias y hemos ampliado nuestra oferta lúdica ja ja, con la creación de un castillo para sus muñecas con la ayuda inestimable de su hermano.
¡Un saludo para todos y mucho ánimo!
PATRICIA - LUCÍA
Lo primero de todo me presento, soy una mama de 35 años de una niña con TEA de 5 años.
Estos días para nosotros son normales exceptuando que tenemos a la niña en casa, tanto su padre como yo tenemos que ir a trabajar, puesto que los dos trabajamos en el medio sanitario.
Para la niña los primeros días no fueron difíciles, se movía entre su cuarto, el salón y la terraza, al vivir en un ático la terraza nos dio mucha vida. Jugábamos a pasarnos la pelota, descubrimos que en la pared de la terraza se podía pintar con tizas, así que le encantaba que escribiéramos los nombres de los compañerxs de clase y amigxs, bailamos juntas (la música le encanta)…
NADIA
¡Hola a todas!
Es el quinto día de estado de alarma.
Estoy escribiendo desde el ordenador, porque me gusta.
Te voy a contar lo que he hecho estos días en casa:
hago cole en casa, hago dibujo con acuarelas, juego con mis muñecas, con los juegos de mesa y del ordenador, pero lo que más me gusta y me entretiene es tocar el piano. Toco la canción Banana de los Minions, que me ha enviado mi profesora de música Noelia por correo electrónico.
Como me gusta mucho cantar, ayer a las 8 de la tarde, he ido a la terraza con mi micrófono con el karaoke y he cantado ‘November Rain’ de Guns ‘n Roses. ¡Qué guay!
También hago gimnasia y ballet con vídeos en la TV y en mi tablet.
¡Un saludo y un abrazo!
Nadia
LORETO
En estos tiempos de crisis donde estás encerrado en casa, viene bien hacer algo que hace mucho quería hacer pero no pudisteis porque tienes deberes, o actividades extraescolares, o simplemente estudiar para un examen.
Yo pinto, hace bastante tiempo que deseaba pintar tranquilamente, teniendo todo el tiempo del mundo. En estos casos me encanta pintar con rotuladores-acuarela, simplemente con lápices-acuarela, hacía bastante tiempo que no lo hacía y me sentí bien, haciendo lo que quería tranquila y con amor y cuidado, disfrutando.
A mí eso me da mucha esperanza, te das cuenta que hay muchas cosas que puedes hacer cuando pasas un momento desesperante, cuando las cosas no van bien. Cosas de la vida.
SONIA
CUARENTENA... ¿MERECE LA PENA?
Nunca olvidaré esta fecha: 13.03.2020. Nos avisaron que iban a cerrar el instituto por una epidemia, de la que ya habíamos oído hablar meses atrás, pero todavía no nos acabábamos de creer esta noticia...Todos mis compañeros se quedaron bastante impactados, pero sobre todo yo. A mí me encanta ir al instituto y juntarme con mis amigos.
Cuando llegué a casa, estaba triste y enfadada. Lo intenté hablar con mis padres, pero no me pude calmar, sobre todo porque también estaba prohibido salir de casa, y eso me relaja cuando estoy nerviosa. Aquel día lo pasé muy mal, hasta que vinieron mis tíos. Con ellos pude entretenerme al menos un rato y hablar tranquilamente hasta que nos fuimos mis padres y yo a casa.
El primer fin de semana fue horrible: el sábado perdí los nervios porque mis padres no me dejaron salir. Ese día hubo mucha tensión en casa, hasta que recuperé la calma y hablé sinceramente con mis padres; y llegamos a un pacto: nada de gritos y cuando nos pusiéramos nerviosos cambiar de tema o actividad.
Poco a poco, he estado haciendo diversas tareas para entretenerme en casa. Aparte de adelantar trabajos de clase, también he estado mucho rato escuchando música, y ya se me van ocurriendo nuevas ideas para el cuento de los gatos que estoy escribiendo. Incluso me propongo hacer ejercicio con la bici estática. Gracias a esto podré vivir esta experiencia con positivismo y seré fuerte.