Publicado: jueves 22 de julio por ALICIA, BELÉN y DIEGO (*)

Lo prometido es deuda. Vinculado al artículo de la semana pasada, la nueva publicación de TEA con A analiza la docuserie australiana "LOVE ON THE ESPECTRUM" ("El amor en el espectro autista", en su título en castellano). Y lo hace a través de la visión y opiniones de tres de las personas que forman parte del Equipo de Profesionales de la asociación. Son Alicia, Belén y Diego quiénes hablan sobre y desde la miniserie, acerca del amor, las relaciones, el matrimonio, la discapacidad y la organización de citas de solterx... en el espectro del autismo.

Chloe

Ruth

Amanda

Lotus

cuatro nombres anotados de entre la amplia lista que aparecen a lo largo de los cinco capítulos de la miniserie documental. Tienen en común varias cosas: son nombres de mujeres, abiertamente interesadas en sociabilizar, hacer amigxs, conocer personas afines, y todas están dentro del espectro del autismo. Resumiendo rápidamente la sinopsis de la miniserie, sigue a varias personas con TEA en diferentes situaciones familiares y sociales, principalmente en citas y reuniones sociales donde se busca que se conozcan y puedan comenzar (o no) algún tipo de relación.

Una de las primeras cosas que llaman la atención de la docuserie es el hecho de que sitúa el foco en personas con TEA que ya se encuentran en la edad adulta. Eso es un punto de vista más que interesante y necesario, puesto que el reflejo que encontramos en los títulos audiovisuales que, tanto en obras de ficción como de no ficción se centran en el TEA, u otorgan a un personaje con TEA un peso importante en la historia, suelen centrarse en la infancia o juventud. Es de agradecer una obra en la que se nos muestren preocupaciones, objetivos y anhelos de personas adultas dentro del espectro del autismo.

En ese sentido nos llama positivamente la atención el cuidado del equipo de rodaje por empatizar con el grupo de personas dentro del espectro. Respetar y entender sin coartar su singularidad. Se muestran tal como son, lo cual nos permite ver y comprender que el TEA no es igual en todos los casos. Esa posibilidad de conocer la amplia diversidad de afectación y presencia del TEA en las personas es uno de los principales aciertos de la miniserie. Refleja la realidad, estamos viendo personas reales sin interpretarse a sí mismas. Son ellas mismas.

Por ejemplo, nos permite conocer cómo varias de las mujeres (y algunos hombres) que protagonizan o participan en la miniserie, manifiestan abiertamente su condición bisexual. Y está muy bien tratado en el montaje porque no se le da mayor ni menor importancia, se presenta como una posibilidad más que está presente en la vida de este grupo de personas adultas.

De hecho otro de los aciertos, como así se ha destacado en otros artículos de diferentes medios que han hecho una reseña sobre la miniserie, es la manera tan natural, abierta y "sin filtros" con la que las personas que aparecen en pantalla nos hablan (se hablan) acerca de sus preferencias, aficiones, gustos y deseos dentro de las relaciones y el amor. La población neurotípica damos un respingo de sorpresa ante expresiones mucho más libres y desprejuiciadas que les escuchamos decir en entornos, situaciones y ambientes que normativamente no serían los adecuados. Y aquí aparece una de las primeras aportaciones que hace la miniserie para que nos cuestionemos: ¿quién presenta de manera más sincera y honesta sus anhelos y expectativas?

En relación con esta cuestión, la pareja que forman Ruth y Thomas, dos adultos con TEA casados e independizados desde hace años, nos encanta y deja una de las frases de la serie (que las tiene y muchas). Ante la pregunta de si están enamorados, Ruth responde sin pestañear: "vamos un poco más allá del amor". Y en esencia, "Love on the spectrum" permite a cualquier persona que se siente a disfrutar de sus cinco episodios, llegar un poco más allá de los estereotipos sobre el TEA.

En los diferentes capítulos encontramos cenas de solteros organizadas por una asociación de personas con discapacidad, campamentos de convivencia para adultos con discapacidad en la que conocer gente y forjar relaciones y amistades. Incluso conocemos a una profesional especialista en relaciones de personas con TEA que ayuda a Michael, uno de los protagonistas, a tener una primera cita personal con Amanda a la que ha conocido en la cena de solteros antes referida.

De hecho es a través de Michael, un veinteañero cuyo objetivo en la vida, como el mismo confiesa a cámara es "llegar a ser un marido para mi mujer", como encontramos un reflejo evidente de la visión completamente diferente de cómo interpretar las relaciones y el amor si lo comparamos con las afirmaciones que hace Chloe, una de las mujeres con TEA de una edad parecida. Ella se reconoce bisexual, aunque afirma haber sentido más interés en las mujeres. Tiene citas con un hombre y una mujer (Lotus) reconociendo que no da importancia al físico de la otra persona, y confiesa a cámara, al igual que Ruth, que tratar de conocerse con una persona que también está en el espectro del autismo, le permite no fingir en la relación. Michael por el contrario, en su objetivo de casarse antes de que pasen otros 25 años de su vida, vehementemente le insiste a su madre para que elimine la posibilidad de que eso no ocurra cuando ella le pregunta: "¿qué ocurriría si eso no pasase?" el que no pase no es una opción, y esa sentencia firme nos lleva indefectiblemente a hacer una construcción donde el género (masculino) tiene importancia.

En definitiva, su visionado nos permite descubrir muchos rostros diversos en el espectro del autismo, también desde un punto de vista de género. Chloe, en un momento dado, expresa que sufrió bullying en su infancia a causa de su condición. Y el matiz es importante puesto que en esa afirmación intuímos que no habla solamente de una condición autista, sino también como mujer. “El sufrir acoso me ha hecho ser cómo soy. Sin él hubiera sido una persona completamente diferente.”

Por poner críticas, que también las hay, diríamos que falta una realidad que no está presente en la serie: que las citas organizadas o elegidas por lxs protagonistas con TEA, fueran con personas sin TEA o sin discapacidad. De hecho, la pareja que ya está formada y se nos presenta en el documental, Ruth y Thomas, es también una pareja donde ambas están dentro del espectro. Por cierto, que el hombre en esa pareja, Thomas, no solamente se ha casado y vive de manera independiente con Ruth, sino que trabaja como conductor de un autobús urbano. Australia no solamente son las antípodas de España por su situación geográfica...

"LOVE on the Spectrum" es por lo tanto un reality de personas reales, diversas, sociables y en el espectro del autismo. Y nos ha encantado. Queremos conocer más acerca de las historias de estas mujeres, de estos hombres y de tantxs otrxs que nos rodean. Esperamos poder hablaros de nuevas temporadas o de proyectos similares.

Eso será en otro artículo, este termina con una recomendación. ¡Ver esta miniserie! ¡Hablar de esta miniserie!

Mucho LOVE para todxs.

(*) Alicia Gascón Sangüesa, Belén Buesa Corvinos y Diego López Pueyo forman parte del equipo de profesionales vinculados a la asociación Autismo Huesca. Las opiniones manifestadas en el presente artículo son personales y manifestadas con total libertad por sus autores. La asociación no es responsable de las mismas. 

#TEAconA

#TodoSaldrábien

#felizverano