Publicado: jueves 23 de mayo por LAURA SIMÓN MONTAÑÉS
No cabe duda del potencial que tiene el ejercicio físico en el ámbito cognitivo, fisiológico y social de las personas. Algo que podrían corroborar Cristina y Lucía, socias de Autismo Huesca, que participaron en unas sesiones de actividad física con la Universidad.
Me llamo Laura, y junto a algunos compañeros de la facultad participé y diseñé unas situaciones lúdico-deportivas para personas con TEA (Trastorno del Espectro del Autismo). En éstas teníamos un objetivo común: conocernos y divertirnos en movimiento. A estas sesiones acudieron algunas personas usuarias de la Asociación Autismo Huesca, donde la presencia de género femenino fue menor respecto al género opuesto. Sin embargo, este hecho no requirió adaptaciones en las actividades diseñadas, ya que planificamos para las personas y para sus necesidades (independientemente de su género o atributos). Porque las posibilidades de las personas dependen de las capacidades que están desarrollando en ese momento, y cada individuo tiene las suyas.
La presencia de estas dos mujeres contribuyó a mostrar una imagen del deporte reflejo de la diversidad y de la pluralidad, donde se visibilizó a ambos géneros de forma adecuada, evitando los roles sociales.
Cuando conocimos la personalidad de ambas participantes, intentamos potenciar sus habilidades, pues no podemos perder ni una sola competencia de ningún practicante, sean cuales sean sus características. Durante la práctica interactuamos con personas únicas, diversas y con entidad propia. Este aspecto nos convierte en agentes para que todas las personas que practiquen actividad física lo hagan en un entorno de igualdad y de respeto.
Y respecto a cómo fue la experiencia, no tenía ideas preconcebidas de cómo iban a desarrollarse las sesiones, y sin embargo se revolvieron de forma satisfactoria. Gracias a Cristina y Lucía por traer las ganas, por la participación y sobre todo por la presencia. Vuestra predisposición influyó en que fueran unas prácticas memorables.
Antes de despedirme, quisiera manifestar que la actividad física es una tarea permanente a lo largo de la vida por lo que resulta imprescindible crear igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres para que este hábito pueda generarse desde el primer momento.
Solo me queda daros las gracias por venir, un saludo,
Laura